#ElPerúQueQueremos

SANTUARIO, PERVERSA REALIDAD

Santuario se parece mucho a la realidad, en su forma más perversa: los honestos son descritos y entendidos como bobos inútiles que con sus buenas acciones no logran nada;los corruptos y charlatanes, en tanto, se muestran seguros, triunfan, son los héroes que la masa alza en hombros.

Publicado: 2020-05-22



Todos los críticos y estudiosos de William Faulkner afirman que la primera versión de su libro Santuario contenía tal crudeza que era casi intolerable, esa era la razón por la que ningún editor se atreviera a publicarlo.

Faulkner trabajó por segunda vez en la novela con la intención de mejorarla en sus aspectos técnicos y tal vez así disimular su contenido violento. Se sentía avergonzado por haber escrito un libro pensando solamente en algo que atrajera a los lectores. “Para mí esta es una idea barata porque fue deliberadamente concebida para hacer dinero”, escribió en el prólogo, una vez impreso el libro.

La historia publicada en 1931 contiene, al igual que en su primera versión inédita, violencia, sexo y decadencia; pero el abordaje de estos temas, la forma que tiene el libro, hace que, más que concentrarnos en lo escandaloso, seamos encandilados por una prosa persuasiva que nos sumerge en los aspectos más corruptos del hombre.

La trama del relato gira en torno a Temple, una chica bien, que es violada por un gangster llamado Popeye para ser sumergida en un mundo corrompido; y a Horace Benbow, un abogado idealista, que intenta ayudar a Lee Goodwin, acusado injustamente de asesinato.

Santuario demuestra lo torpe y mediocre que puede resultar el bien, en un mundo que ha sido colmado por el mal. Las buenas acciones de Horace son confundidas, mal interpretadas. Su hermana lo censura y reprocha por ayudar a delincuentes deshonrándola a ella y a su familia. La población de Yoktapatawpha lo mira como un necio oportunista, más interesado en la mujer de su cliente que en ganar el juicio. Mientras tanto, Popeye parece salir siempre impune durante todo su camino maléfico, hasta que la desidia -quizá la culpa, algún sentimiento por Temple- se apodera de él y se abandona.

Santuario se parece mucho a la realidad, en su forma más perversa: los honestos son descritos y entendidos como bobos inútiles que con sus buenas acciones no logran nada;los corruptos y charlatanes, en tanto, se muestran seguros, triunfan, son los héroes que la masa alza en hombros.

Esta clase de libros, con su espléndida arquitectura, además de fascinar a los lectores, logran suplantar a la realidad real para sembrar la alarma, la certeza de que algo debe cambiar, de que las cosas no andan bien, de que el mundo está mal hecho y debe ser reconstruido.



http://agujerointemporal.blogspot.com/2020/05/santuario-perversa-realidad.html


Escrito por

Jaime Bueno

http://agujerointemporal.blogspot.com/


Publicado en